BLANCO

Símbolos o conceptos simbólicos utilizado en esoterismo o religiones.

Considerado el color de la luz, de la pureza y de los dioses benéficos. Simbólicamente el blanco no está vinculado a la plata, sino al oro.

Téngase en cuenta que se representa a Jesús, en su apariencia de Juez, con «cabellos blancos como la blanca lana».

Guénon* al hablar de este color y establecer la gama del arco iris, considera al blanco como el séptimo color y lo sitúa en el centro. Al mismo tiempo afirma que el color blanco también corresponde al centro espiritual de la Tierra, Tule.

En el Apocalipsis de san Juan, el blanco es el color de los ropajes de aquellos que han salido de la gran tribulación, y han sabido lavar sus vestidos blanqueándolos con la sangre del Cordero (Cirlot).

BLANCO

El color de la luz, de la pureza y la perfección. En realidad no es un color (sino la suma de todos ellos), como tampoco lo es en su contrapartida el negro; en la escala cromática el blanco tiene por ello un lugar de excepción. Representa lo absoluto, el principio y el fin, la reunión de los extremos; de ahí su presencia en ritos de nacimiento, de bodas, de iniciación y de defunción; el color de luto, por ejemplo en los países eslavos u en Asia durante algún tiempo fue asimismo en la corte de Francia.

El blanco era el color preferido en los animales elegidos para sacrificio. Las ropas de los sacerdotes a menudo eran blancas para evocar el simbolismo espiritual y luminoso de dicho color, que por razón análoga también lo es de los ángeles y los bienaventurados.

Los cristianos recién bautizados vestían una túnica blanca; en la transfiguración de Cristo sus ropas aparecieron "blancas como la nieve" y son blancas las ropas de las novias, de las postulantes al ingreso en la vida monástica y las de la primera comunión, siempre con el sentido de inocencia y virginidad.

Pero el blanco es asimismo en contraposición con el rojo, el color de los fantasmas y los espíritus; es también frecuente la contraposición rojo = hombre, blanco = mujer.