CLARIVIDENTE

CLARIVIDENTE

Un Clarividente es el hombre cuyo sentido de la vista se ha extendido tanto que percibe otro mundo, invisible para la mayor parte de nosotros, y que es capaz de ver todo lo que hay allí.

No conoce todas las cosas que ve allí por el solo hecho de que las vea, sino tiene que aplicarse para conseguir ese conocimiento.

Cuando la conexión entre el cuerpo vital y el denso de un hombre es un tanto débil, será sensible a las vibraciones espirituales, y si es positivo podrá por su propia voluntad desarrollar sus facultades espirituales, vivir una vida espiritual y recibir a su debido tiempo las enseñanzas necesarias para convertirse en un clarividente educado, dueño de su facultad en cualquier momento, libre de ejercitarla o no, como quiera. Pero si una persona tiene dicha conexión del cuerpo vital con el denso, débil, y es de temperamento negativo, puede ser presa de los espíritus desencarnados, como un médium.

Para desarrollar la clarividencia voluntaria es necesario someterse a una tarea muy ardua, y por consiguiente, esta facultad la poseen muy pocos, mientras que la clarividencia negativa, desgraciadamente, la han desarrollado muchos que no tienen elevados ideales que les impidan prostituir su facultad por dinero. Los ejercicios convenientes para desarrollar la clarividencia sólo puede dar una persona clarividente; y todo el que tiene el poder de dar esos ejercicios sabe también cómo evitar desarrollos indeseables.

Estos ejercicios nunca se venden: son siempre recompensa del mérito.

Símbolos o conceptos simbólicos utilizado en esoterismo o religiones.