ONIROMANCIA

ONIROMANCIA

Práctica adivinatoria que consiste en predecir el futuro mediante la interpretación de los sueños.

Su antigüedad es muy remota, pues en textos caldeos como la epopeya de Gilgamesh, escrita en el tercer milenio antes de nuestra era, se puede comprobar la importancia que alcanzan los sueños como elemento profético.

Por entonces ya se realizaban interpretaciones de sueños, y según tablillas encontradas, tanto en Sumeria corno en Babilonia se les atribuían augurios muy específicos.

El contenido de los sueños venía a ser una comunicación con los dioses, y lo que éstos decían tanto podía ser una advertencia como una premonición de hechos futuros.

No obstante, los babilonios que parece dominaban el arte de la interpretación onírica, eran ya muy cautos a la hora de hacer sus pronósticos ya que sabían que los sueños podían resultar engañosos.

En el Antiguo Testamento se concede a ciertos sueños un carácter trascendente, como el que tuvo Jacob, o el de Gedeón; no obstante, tal como se recomienda en el Deuteronomio, había que mostrarse muy prudentes a la hora de analizar y enjuiciar los sueños.

Por su parte, los griegos también concedieron gran importancia a la interpretación de los sueños. Homero establece claramente la diferencia existente entre sueños veraces y sueños falsos. Aristarco y Estrabón, siglos II y I a. C. reconocieron la importancia de los sueños proféticos. Aristóteles escribió un tratado sobre la predicción que se puede hacer por los sueños, aclarando que es importante considerar la trascendencia de algunos sueños proféticos, si bien es necesario dominar una compleja simbología para hacerlo adecuadamente.

En Roma, Cicerón, que no fue precisamente muy crédulo y criticó duramente a los augures en su obra Sobre las predicciones no dejó de tener muy en cuenta la importancia de los sueños proféticos. Al respecto recuérdese el sueño que tuvo Calpumia, mujer de Julio César, sobre la inmediata muerte de éste; o el de Bruto en que se le anticipó su derrota ante las huestes de Marco Antonio y Octavio.

En nuestro tiempo, y al margen de las investigaciones realizadas sobre el mecanismo del sueño, todavía quedan ciertas parcelas referentes a los sueños proféticos y otros fenómenos que siguen dando al sueño un carácter oculto.

Término relacionado con magia, amuletos, sistemas oraculares.