SATANÁS

SATANÁS

Significa adversario o contradictor, y es el nombre dado por la teología de las religiones dogmáticas al Enemigo de Dios, como por ejemplo Ahriman en el Zoroastrismo, el Señor de los Espíritus Malignos.

Involucra el poder sensual que busca encerrar al hombre en su existencia terrena, de que no sea libre e independiente en su vida espiritual, conminándolo solamente a los asuntos de la Tierra.

Satanás es, evidentemente, la personificación del mal bajo una forma alegórica, porque no puede admitirse un ser malo que lucha de potencia a potencia con la Divinidad y cuya única ocupación es la de contrariar sus designios.

Siendo necesarias al hombre imágenes y figuras que hieran su imaginación, ha pintado a los seres incorporales bajo forma material con atributos que recuerdan sus cualidades y defectos.

Así es como, queriendo los antiguos personificar el tiempo, lo pintaron en figura de anciano con una hoz y un reloj de arena, pues la de un joven hubiese sido un contrasentido.

Lo mismo debe decirse de las alegorías de la fortuna, de la verdad, etc.

Los modernos han representado a los ángeles o espíritus puros por una figura radiante, con alas blancas, emblema de la pureza, y a Satanás con cuernos, garras y demás atributos de las bestias, emblemas de las pasiones bajas.

El vulgo, que tomó las cosas literalmente, ha visto en el emblema una individualidad real, como en otro tiempo a Saturno en la alegoría del Tiempo.

Concepto utilizado en el judaísmo o, cábala