La actividad consciente del hombre y sus raíces socio-históricas

Aleksander R. LURIA

Principios generales

Postura de la filosofía idealista
Postura del positivismo científico-natural
La psicología científica

El trabajo y la formación de la actividad consciente

El lenguaje y la conciencia del hombre

Teorias sobre la procedencia del lenguaje Humano

Tres funciones principales del lenguaje

Tres funciones principales del lenguaje 1
Tres funciones principales del lenguaje 2
Tres funciones principales del lenguaje 3

Trascendencia del lenguaje para la formación de los procesos psíquicos 1

Trascendencia del lenguaje para la formación de los procesos psíquicos 2

El lenguaje y la conciencia del hombre

La segunda circunstancia que motiva la formación de la estructuralmente compleja actividad consciente del hombre, es el surgimiento del lenguaje.

Por lenguaje se entiende generalmente un sistema de códigos con ayuda de los cuales se designan los objetos del mundo exterior, sus acciones, cualidades y relaciones entre los mismos. Así, pues, el vocablo «silla» designa en el lenguaje un tipo de mueble; el vocablo «pan», un objeto que se come; mientras que las palabras «duerme» y «corre» denotan acciones; y los términos «ácido» y «llano», cualidades de las respectivas cosas; o las palabras «sobre», «bajo», «junto» y «por consecuencia», relaciones de diversa complejidad entre los objetos.

Lógicamente, las palabras asociadas en frases son los medios de comunicación principales con ayuda de los cuales el hombre guarda y transmite la información y asimila la experiencia acumulada por generaciones enteras de otros hombres.

Un lenguaje similar no existe entre los animales, y él aparece sólo durante el proceso de transición a la sociedad humana. El animal posee variados medios de expresión de su estado, los que son percibidos por otros seres y pueden ejercer una influencia substancial en el comportamiento de los mismos. Cuando el guía de una bandada de grullas advierte peligro lanza chillidos alarmantes, a los que la bandada reacciona vivamente. En la manada de simios cabe observar toda una gama de sonidos, que expresan contento, agresión, miedo ante el peligro, etc. Un complejísimo sistema de expresivos movimientos se puede observar en las llamadas «danzas» de las abejas, de carácter variable según la abeja regrese del campo con una afortunada recolección o sin ella, y también en dependencia del rumbo y la longitud del camino recorrido. Dichas «danzas» se transmiten a otros individuos y pueden orientar de manera diversa el comportamiento de las abejas.

Pero el «lenguaje» de los animales no designa nunca objetos, ni tampoco destaca las acciones o cualidades de los mismos, y, por consiguiente, no es lenguaje en el verdadero sentido de la palabra.